A mi hermano Junior, el rey enjaulado de Ucayali
Jaguar negro, Dios de la amazonía
Señor de la muerte
Wiso ino, ino moxo
Hermoso yanapuma del Perú.
Los hombres no comprenden tu sufrimiento
El querer volver a tu jungla, a tu reino
Donde puedes hipnotizar al tapir
O al cazador del monte
Matarlos y degustar sus sesos crudos
Como lo hacías por Purús, selva adentro
No sé si te acuerdas
Por eso tu nombre es sangre, yawar.
Jaguar negro, señor de la oscuridad
Ojalá que los peruanos entendamos
Que a un rey no se le debe dar una jaula
Ni un encierro digno
La libertad, es lo que mereces.
Castiga a tus carceleros
Que sufran por el encierro
No tengas piedad
Matsonsori, otorongo negro
Yo abogo por ti noble señor de la sangre
Joya de la naturaleza
Máquina perfecta en equilibrio
En músculo y elasticidad.
Si nadie te defiende, al menos sabrás que Juan
Tu hermano, habla por ti.
Perdóname la audacia de llamarte hermano
Pero conocí a tu padre y a tu hija
Y tu familia es como mi familia
Y somos hermanos de sangre
En el amor universal hacia tu jungla.
Jaguar, yawar, sangre de mi sangre.
Me dueles tanto, hermano.
(Pucallpa, enero, 2009)
Juan Ochoa López (Lima, 1965 - 2020)
Foto: Juan Ochoa López